La puerta del trastero de tu casa tiene un candado que puede ser cerrado sin llave (como todos, creo), pero necesita una llave para ser abierto (no es posible hacer un duplicado de esa llave).
Un día decides hacer limpieza de ese trastero y cuando acabas cierras el candado perfectamente. Al día siguiente vuelves a abrir, y te encuentras un cadáver en su interior.
Si solo tú tienes la llave y nadie más vive contigo, lógicamente la policía sospecha que eres el asesino, pero no lo eres, así que ¿cómo se las ingenió el verdadero culpable para colocar el cuerpo en tu trastero?
Jorge quería usar el portátil de su hermano, pero no sabía la contraseña. Como sabía que tenía muy mala memoria y lo anotaba todo, buscó por los papeles de su mesa y encontró esta nota: